Quizás me este metiendo en terreno pantanoso pero me apetece hablar de la dichosa huelga.
Esta tarde, cuando he llegado al trabajo me he encontrado una polémica discusión sobre si hacer o no hacer huelga y lo que me ha dolido es que le hayan sacado los colores, sin razón alguna, a alguien que aprecio.
Todo el mundo tenemos tanto derecho a hacer huelga como a trabajar y creo que deberíamos respetarnos unos a otros.
Yo no hago huelga, no porque no esté deacuerdo con lo se reivindica si no porque no me puedo permitir que me quiten un día de sueldo, de cotización y que encima que la empresa no me vuelva a llamar para trabajar.
También pienso que ahora, que ya esta aprobada la reforma laboral, esta huelga va a servir de bien poco y que tendríamos que pensar en otros métodos que fueran más efectivos para que la voz del pueblo se escuchara bien fuerte.
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